"Pensad en la Pasión de Jesús"
Al final del segundo mensaje, la Virgen nos dirige esta petición: "Pensad en la Pasión de Jesús". ¿Lo haces? ¿Piensas en su Pasión? ¿Consideras el gran amor que ha tenido por ti? En su Pasión, Él pensaba en ti y todo lo hizo por ti.
La cruz parece contraria a la felicidad. ¿Puede haber felicidad y gozo en una situación de dolor y sufrimiento tan extremos como fueron los de la crucifixión de Nuestro Señor? Pero este misterio no se contradice con la felicidad, pues gracias a la Pasión de Jesús se nos dan todos los bienes y gracias y, sobre todo, nos llega la esperanza de la salvación.
En la cruz, donde parece ser más fuerte la oscuridad, hay una luz que brota con fuerza y que quiere iluminar el corazón de todo hombre para llevarlo a la verdad. La cruz es luz. Para ver esto hace falta mirar y pensar en la Pasión de Jesús con fe. Así animó Juan Pablo II a los jóvenes en un Domingo de Ramos: